Contracorriente: OSWALDO RAMOS, RECTOR MAGNIFICO
Juan Ramón Martínez
Conocí a Oswaldo cuando éramos jóvenes
en el campo Nerones, Distrito de Isletas, en el departamento de Colón. Él y mis
hermanos, --- Dagoberto y Vany Edgardo-- eran compañeros de grado y
diariamente, tenían que ir a Isletas a recibir clases en la escuela. Mi padre
era peón y su padre Osvaldo Ramos, era el mandador de finca. La madre de
Osvaldo, Alba Luz, era prima de doña Mencha, y tenían entre sí, buenas
relaciones que duraron mientras vivieron. Era muy atento, educado, vivaz e
inteligente. Algunas veces coincidíamos en la “borda”, en donde siendo mayor,
ejecutaba acciones de natación que eran objeto de su “admiración”.
Lo volví a ver en 1965 en Tegucigalpa.
El vino a estudiar Derecho y yo concluía Ciencias Sociales en la Escuela
Superior del Profesorado. Vivía en casa de “Cheche” Ramírez en El Prado y
nosotros, un grupo de “Olanchitos”, subarrendábamos espacios a Max Santos en la
709 de la primera avenida de Comayagüela, en las cercanías de Rancho Chico – donde
vivía Juan Almendrares -- y la Magnolia, punto favorito de nuestra reducida
vida social. Osvaldo, nos visitaba con frecuencia y mostraba los intereses que
le movían. Además de correcto y dedicado estudiante universitario, le
apasionaba la narración deportiva. Me gustaba oírlo, repetir de memoria, un
partido de futbol entre la selección Soviética y Francia. Era notoria su
memoria limpia y la capacidad para recordar detalles, lo que marco su vida para
siempre. No mostraba intereses políticos y tampoco que hubiera dejado el
partido político -- el Liberal-- de su padre. “Cheche” Ramírez, me contó que
había sido Mario Matute, quien le había inclinado hacia el Partido Nacional,
que sería el partido al cual consagraría sus energías.
Cuando ingresé a la UNAH y me matriculé
en Derecho en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, Oswaldo era
profesor distinguido. Nos encamino, con enorme soltura en las primeras rutas
del derecho. Fue nuestro profesor de Introducción al Estudio del Derecho y con
García Máynez, pudimos ingresar a lo que es la obra cumbre de los humanos: la organización
de la vida social, dentro de la justicia, el orden y la ley. Dominaba como
nadie la materia. Y siempre tenía la respuesta oportuna y amable para quienes nos
atrevíamos a preguntar. No era de los profesores que postergaba las respuestas.
Más bien usaba las preguntas para mostrar sus competencias y habilidades. Irradiaba
talento y dedicación y, además, amor por la docencia. Lo hicieron Decano de la Facultad
y en una oportunidad en que mi profesor de la materia, me pidio que le
sustituyera, Osvaldo, me encontró y me pidió que dejara de irrespetar las
reglas y siguiera en mi condición de estudiante, porque no había concluido mis
estudios. Al finalizar mis cursos, Osvaldo logro que lo eligieran Rector de la
UNAH. Era obvio que, desde esa posición, seguiría un curso de acción para
buscar en algún momento, la Presidencia de la República.
Fue un buen Rector. De los mejores que
ha tenido la UNAH. A la altura de Reina, Almendarez, Sagastume, Castillo y
Castellanos. Vinculo a la UNAH con la sociedad y en tiempos, -- en que el
regreso de la institucionalidad civil no tenía rumbos definidos--, se acercó a
las “fuerzas democráticas” que encabezaba Suazo Córdova. En una oportunidad le
reclame la vinculación con los religiosos de Corea del Sur. Disgustado reposto
que, por eso, “tenés fama de comunista”. Exigido, me respondió que el no lo creía.
Lo que hizo que la discusión no progresara.
No fue sectario como Rector de la UNAH
y no se merece los rencores de Roberto Sosa – porque lo quiso emplear de nuevo;
pero la Auditoria se opuso amenazante, cosa que disgusto al poeta de “Los
Pobres”—ni tampoco a las invectivas de Longino Becerra que, -sin pruebas--, le
atribuye responsabilidad en el “desaparecimiento” de personas.
Fue candidato presidencial y como
hombre culto, quiso elevar a los electores a las alturas de lo superior. Los agachados,
que miran hacia abajo, rechazaron su estilo, su cultura y sus formas de
expresión. Creo que mostro que, en vez de mirar hacia abajo, los políticos
debían buscar las alturas para hacer soñar al pueblo. Las mayorías, le dijeron
que no.
Ahora muerto, sin rencores contra
nadie, es obligado el silencio respetuoso sobre su vida ejemplar y de servicio
a la cultura y a la convivencia civilizada. Paz a su alma.
NO SE DICE NADA...MALICIOSAMENTE ...DE QUE FUE SECRETARIO.... DE UN GRUPOF DE EMPRESARIOS Y DEL GENERAL GUSTAVO ALVAREZ REZ MARTTINES
ResponderBorrarGUSTAVO ALVARES MARTINEZ ..Y MARGINAR AL PRESIDENTE ROBERTO SUAZO CORDOBA ...HACERLO A UN LADO Y QUITARLE EL PODER EJECUTIVO..NO RECUERDO EL NOMBREE DEL GRUPO .????.....TAMPOCO SE DICEN NADA .QUE COMO RECTOR ...Y POR UN . OLVIDO DELIBERADO !!!!.....DE COMO SIENDO RECTOR DE. LA UNAH.. LIDERÒ..A UNOS ESTUDIANTES. MANCHA BRAVA...Y LOS REPRESORES...PAGADOS POR LA ALCALDIA DE """CHECHE RAMIREZ SOTO """""QEPD. Y DE """"DEBORA DE BUDDE"""...QEPD... HASTA LA EMBAJADA AMERICANA A... APEDREARLA Y MANCHAR SUS PAREDES...????. Y ENTONCES DONDE ESTAMOS ?????...O ..FUE A LA IGLESIA CONFESÓ ...Y LE PERDONARON...TODO.. ....?????
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