LIMITACIONES DE LA MADRE Y ESPOSA DE FRANCISCO MORAZÁN (1840/1845)
Doña María Josefa Lastiri Lozano
---
Juan Manuel Aguilar Flores
Lo acontecido a Francisco Morazán en Costa Rica 1842, ocasionó que familiares en Tegucigalpa se encontraran en una situación difícil. Pruebas existentes indican que la mayor parte de su patrimonio estaba en situación precaria, incluidas las tierras que su esposa poseía en el valle de Comayagua.
La que antes había sido la respetada Doña María Josefa Lastiri Lozano, descendiente de familias acaudaladas de las Provincia de Honduras, tuvo que resignarse a vivir en medios considerados pobres, en relación a su estatus anterior. Así en 1845, por medio de una carta enviada al gobierno costarricense, la viuda reclamó sueldos no cobrados por su difunto esposo, durante los cinco meses que fue Jefe de Estado de Costa Rica. La cantidad ascendía a 625 pesos y la respuesta del gobierno fue negativa. La necesidad de reclamar, indica cuan grandes fueron las limitaciones que sufrió.
De igual forma, Doña Guadalupe Quezada, madre de Morazán, también descendiente de familias con alguna fortuna en el periodo colonial. En 1840, cuando el gobierno de Honduras estaba presidido por el acérrimo enemigo de Morazán, Francisco Ferrera, exponía a las autoridades que desde su salida de su hijo hacia El Salvador ella había quedado sin recurso alguno para subsistir y además dijo: “Tengo setenta años de edad que me impiden trabajar para mi mantenimiento; no poseo bienes algunos porque los pocos con que contaba, fueron concluidos antes del fallecimiento de mi marido: no tengo yo ni mi familia el menor participo en los negocios públicos…En esta virtud y en la de que mi citado hijo ha emigrado y posee algunos bienes, de que justamente dispone el Gobierno, para los gastos de la guerra, he creído conveniente ocurrir a la bondad del mismo”.
Por declaración de la madre y su esposa nos da pista sobre lo que pudo haber pasado con parte de los bienes que poseía Morazán en Honduras. La frase de la cita: “..algunos bienes, de que justamente dispone, el gobierno, para los gastos de la guerra...” nos está diciendo que las propiedades de Morazán fueron enajenadas (confiscadas) para financiar una guerra contra el mismo propietario.
Fue
tanto el temor de Ferrera, -que Morazán antes de su muerte regresara- a
Honduras, emitió un acuerdo que expresaba: “Tomar
reos de las cárceles para el servicio de las armas, conmutación de penas, y
ascensos, según la valentía demostrada en caso que Morazán invada a Honduras”. En
Omoa, ordenó se construyera una casa de veinte varas de largo con el ancho correspondiente
sobre la fortaleza para habitación de la tropa y oficiales. Esto último no fue factible.
NOTAS
-Zúñiga Huete, Ángel. “Morazán”. Tercera Edición
Teg. 1992. Pág. 258
-Castañeda, Elvia, “María Josefa Lastiri”.
Tegucigalpa. Sin editorial. 1991. Pág. 59.
-Decreto de tomas de reos. Comayagua, abril 15.
1842. ANH.
-Consideración del gasto extraordinario de
2,000 pesos que se debe causar en la construcción de una casa en el castillo de
Omoa. Mayo 9, 1843. ANH.
Glosario
Concluido. Rematar minuciosamente un objeto.
Participo. Tener algo en común con otro u otros.
Tener parte en un negocio.
Comentarios
Publicar un comentario